Casería de Jesús
Monovarietal Picual
Productor
Localidad
Producción
Carmen y Eduardo Duro Almazán
Puente de la Sierra, Jaén, España
3.000 botellas previstas desde la cosecha temprana
EL OLIVAR
Situado al pie de las montañas cerca de la localidad de Jaén (Andalucía), en el pueblo de Puente de la Sierra, a orillas del Río Quiebrajano y rodeando la residencia familiar, este olivar alberga una rica vegetación (jazmines, pinos, palmeras), lo que a su vez contribuye al perfil aromático del aceite extraído. Actividades de oleoturismo disponibles.
LA EXPERIENCIA SENSORIAL
De la variedad Picual, autóctona de la provincia de Jaén (Andalucía), esta edición limitada de cosecha temprana (sólo 3.000 botellas) se obtiene de aceitunas especialmente seleccionadas que pasaron por la almazara del 13 al 16 de octubre de 2022. Verde Vivo, este aceite revela una Intenso frutado de hojas y hierba recién cortada, evocando aromas de manzana verde con un amargor y picante muy equilibrado -efecto balsámico- que persiste en boca.
MARIDAJE
Aves, ensaladas, quesos, pan.
PARA PROFUNDIZAR
A diferencia del cortijo andaluz, de uso exclusivamente agrícola, la casería de Jaén sirve también como lugar de ocio. Situada únicamente en los alrededores de la ciudad de Jaén, la casería servía de lugar de descanso para los notables jienenses que abandonaban la ciudad en los días de mucho calor para refrescarse. De ahí la vegetación más diversa presente en la propiedad: pinos, palmeras, jazmines.
Así, dos edificios constituyen la “casería”: uno de uso agrícola, habitado por los “caseros” (que viven allí todo el año), y otro de uso privado de los propietarios, comunicado por el “patio”, de uso múltiple. Lugar: agrupamiento de aceitunas y limpieza de redes durante la olivada, lavado de ropa, elaboración de helado artesanal durante el verano.
Además, una tradición muy antigua justifica el nombre de “Casería de Jesús”. Cuenta la leyenda que una tarde de 1580 un anciano pidió allí refugio para pasar la noche. Después de cenar, el anciano pidió que le llevaran un baúl a su habitación para poder tallar en él la imagen de Jesús como agradecimiento por la acogida brindada.
Al día siguiente, los dueños, sorprendidos de que el anciano no daba señales de vida, entraron a su habitación y no sin asombro observaron que había desaparecido, dejando en su lugar una hermosa imagen de Jesús Nazareno, hoy conocido popularmente con el nombre de “Abuelo”. ”.
Al margen de las posibles creencias de estas leyendas, lo que está documentado es que la casa perteneció desde el siglo XVIII a las Carmelitas Descalzas, quienes evangelizaron estos lugares y tenían un molino de aceite, con su prensa de viga y sus ollas. Hoy en día se conserva en el cuartel una puerta de madera con el escudo de esta congregación religiosa.